VALÈNCIA, 8 de septiembre. La representante del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Pilar Bernabé, ha manifestado que la reciente carta abierta dirigida a los medios por la periodista Maribel Vilaplana, quien mantuvo una comida con el presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, durante el episodio de lluvias intensas, debe resultar en su inmediata renuncia. Bernabé ha expresado su preocupación por la reiterada falta de veracidad en la gestión del gobierno autonómico.

En sus declaraciones a la prensa este lunes, tras participar en una reunión de coordinación de emergencias en el Centro de Coordinación de Emergencias de L'Eliana, la delegada ha optado por no evaluar a alguien que carece de responsabilidades en el asunto, en referencia clara a Vilaplana. En cambio, centró sus críticas en Mazón, quien ha ofrecido versiones contradictorias respecto a la situación.

Bernabé ha destacado que, mientras inicialmente se afirmó que en El Ventorro no había cobertura, ahora se reconoce que sí existía y que se recibieron llamadas. Recordó que, en momentos críticos, la consellera Salomé Pradas –cesada el noviembre anterior– intentó comunicarse con el presidente en varias ocasiones sin éxito, lo que genera graves interrogantes sobre su compromiso.

La representante del Ejecutivo central se ha mostrado especialmente preocupada por el hecho de que Mazón no contestara en un contexto donde la vida de muchas personas estaba en peligro, subrayando una alarmante indiferencia por parte del gobierno de la Generalitat Valenciana.

Bernabé ha apuntado que esta situación empieza con el propio presidente, pero también incluye a la vicepresidenta Susana Camarero y otros miembros del Consell, quienes parecen haber estado desconectados de la seriedad del peligro al que estaban expuestos miles de valencianos.

Según su criterio, lo más preocupante es que la carta de Vilaplana representa una nueva manifestación del sufrimiento de las víctimas: "Cada vez que aparecen nuevas versiones y contradicciones, aumenta la irresponsabilidad de aquellos que debían actuar, lo que impacta dolorosamente en quienes han sufrido esta tragedia. Como sociedad, no podemos permitir que esto continúe", apuntó.

Bernabé aseveró que siempre hay un obstáculo en la colaboración entre administraciones y en el trabajo conjunto, siendo este obstáculo "Carlos Mazón". Ante tal panorama, opina que el contenido de la misiva de Vilaplana debe derivar en la dimisión del presidente de la Generalitat, quien, según ella, mostró despreocupación y falta de acción en un momento crítico.

Finalmente, la delegada concluyó que esta actitud de desinterés por parte del Consell no solo es lamentable, sino que merece, por dignidad, una renuncia inmediata por parte de Mazón. “Eran meros espectadores de un fenómeno que era su responsabilidad gestionar", zanjó Bernabé enfáticamente.