En un claro llamado a la acción, el sindicato SPPLB ha exigido la destitución del actual responsable de la Jefatura del Cuerpo de Bomberos de València y ha convocado una movilización para el próximo 11 de diciembre, en respuesta a lo que consideran una gestión inadecuada en situaciones críticas, como la reciente riada que asoló la región.
VALÈNCIA, 4 de diciembre. En medio de un clima de creciente descontento, el SPPLB ha sostenido que es imperativo realizar un "cambio de dirección técnica" en el departamento, argumentando que las decisiones adoptadas durante emergencias han sido ineficaces. La organización ha calificado de "deficiente" la planificación y respuesta ante la crisis, señalando que, a pesar de contar con más de 100 bomberos listos para actuar, estos se encontraron inoperativos en el momento crucial.
Durante una reciente rueda de prensa, miembros del sindicato expresaron su descontento hacia la Jefatura del Departamento de Bomberos, enfatizando que sus críticas no están motivadas por razones políticas y destacando, sin embargo, el esfuerzo realizado por el concejal de Bomberos para mejorar las condiciones del servicio. Pese a ello, han manifestado su incapacidad para comprender el apoyo incondicional que este funcionario brinda a la Jefatura, a pesar de las numerosas quejas provenientes de quienes están en el frente de la emergencia, arriesgando sus vidas en el día a día.
El SPPLB ha presentado una serie de hechos que consideran "desconcertantes" en relación a la gestión durante la reciente riada. En particular, han hecho hincapié en la activación del Grupo de Rescate Acuático, señalando que uno de sus miembros contactó con la Jefatura a las 11:30 del día de la riada para sugerir la movilización del grupo, solo para recibir una respuesta que indicaba que dicha decisión requería una orden de Cecopi. Este proceso de activación, según critican, fue lamentablemente insuficiente y tardío.
Además, han informado que algunos buceadores de Bomberos València comenzaron a rescatar personas en las primeras horas de la emergencia, pero que los miembros del GRA que se presentaron a ayudar lo hicieron de manera voluntaria, enfrentándose incluso a reproches de algunos mandos por su iniciativa. Reiteran que la Unidad Canina de Rescate, con experiencia adquirida en desastres internacionales, no fue activada hasta tres días después de la ocurrencia de la riada, lo cual resulta inaceptable dado que contaba con los recursos humanos y caninos listos para serlo desde un inicio.
Lejos de mejorar, la situación parece haberse complicado. Salen a relucir las cifras, ya que los bomberos fueron movilizados de manera informal, cuando se decía que 63 de ellos estaban trabajando en las primeras horas de la emergencia, situación que en realidad distaba mucho de ser cierta. En la información presentada el 30 por la mañana a Cecopal, apenas se reportó un refuerzo de 20 efectivos, cuando había una necesidad evidente de mucho más personal.
La falta de recursos fue otra de las críticas planteadas por el sindicato. Los bomberos mencionaron que, durante la emergencia, tuvieron que enfrentarse a condiciones adversas con equipamiento inadecuado, haciendo frente al agua y el fango con materiales que no eran específicos para esas circunstancias. Esta deficiencia evidencia una gestión de recursos que ha dejado a muchos profesionales sin las herramientas necesarias para ejecutar sus labores de manera efectiva.
Frente a lo que consideran una serie de decisiones inadecuadas que han afectado tanto a la ciudadanía como a los propios bomberos, el SPPLB ha manifestado que es momento de exigir un cambio al más alto nivel. Por ello, han convocado a una concentración el próximo miércoles, 11 de diciembre, a las 11 horas frente al Parque Central de Bomberos de València, donde esperan que tanto los profesionales del cuerpo como la comunidad se unan en este clamor por una dirección más competente y responsable.
Tags:
Categoría:
Newsletter
Entérate de las últimas noticias cómodamente desde tu mail.