Agradece, prácticamente en el final de su orden, que Valencia "se me confió a mi precaución y por ella me gasto y desgasto hasta el radical"

   VALÈNCIA, 9 Oct.

   El cardenal arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares, ha encabezado este domingo, Día de la Comunitat Valenciana, el solemne Te Deum en la Catedral, con ocasión de la celebración del 9 d'Octubre. En la misa solemne oficiada para conmemorar la dedicación y consagración de la Catedral a la Asunción de María aseguró sentirse "valenciano con bastante y sano orgullo, católico, sacerdote y obispo en Valencia, y esta es mi mayor gloria en esta etapa de mi historia personal".

   "Valencia se me confió a mi precaución y por ella me gasto y desgasto hasta el radical, hasta la extenuación si de esta manera se necesita", ha señalado el cardenal, que "da merced a Dios" por concederle este rincón "hace ocho años en mi ministerio episcopal y asimismo el día de hoy prácticamente en el final de mi servicio deseo ofrecer gracias por este don que Dios me ha concedido que estimo, admiro y agradezco de una forma especial a este cabildo de la Catedral, signo y manifestación de la diócesis y de su fe inexorable", según informó el Arzobispado en un aviso.

   "Me agrada deciros que les necesito, que cuento con todos nosotros que vais a continuar ayudándome bastante en el ministerio episcopal, ahora lo estáis realizando", ha señalado monseñor Cañizares, que ha añadido que Valencia "no puede ignorar, y menos aquí en hoy, tantas horas de caridad y cultura que nacen de la fe cristiana y del corazón de la Iglesia que ha servido tanto y tan bien al pueblo valenciano que el día de hoy admiramos con sano orgullo".

   Según ha sostenido el cardenal, "lo destacado que le pasó a esta queridísima tierra nuestra es la fe cristiana, es la raíz de lo que es y somos Valencia. La Iglesia en Valencia, en mi representada, prosigue prestando enormes servicios a la sociedad valenciana con la colaboración de instituciones muy primordiales por el aumento de la pobreza económica y cultural".

   "Sé que vamos a seguir creando nuestra historia como pueblo desde un emprendimiento de vida, el de Dios, con una humanidad renovada, con hombres y mujeres nuevos que proseguirán dejando una enorme herencia para bastantes siglos", mantuvo.

   El cardenal aseguró que el 9 d'Octubre "nos une a todos y cada uno de los valencianos en la labor de crear una sociedad valenciana donde la gente donde ella vivimos tengamos la posibilidad desarrollarnos íntegramente". Asimismo, ha asegurado que los integrantes de la Iglesia en Valencia están llamados "a hacer viable, codo con codo con otros, que brote una humanidad novedosa llevada a cabo de hombres y mujeres nuevos con el evangelio".

   "Nos encontramos llamados a proclamar un nuevo estilo de vivir que es el evangelio de la alegría, la caridad, la promesa, la independencia, la realidad, la vida, la justicia y reconocimiento de Dios y pertenencia a su reino que es Jesucristo", ha añadido. Al término de la homilía del cardenal Cañizares, los ayudantes en la Catedral de Valencia han brindado una extendida ovación.

   La Senyera de lo Rat Penat fué trasladada desde la sede de la Asociación, en la calle Trinquete de Caballeros, hasta la Puerta de los Hierros de la Catedral, donde fué recibida por el cardenal. Las campanas del Micalet se han oído al comienzo del Te Deum, en el final y a las 12.00, tal como al comienzo de la misa conventual.

   Además de esto, se ha depositado una corona de laurel en la tumba de Ausiàs March por los presidentes de Lo Rat Penat y de la Real Academia de Cultura Valencia, como homenaje a la lengua valenciana, según el Arzobispado.

   Una vez dentro de la Seo dió comienzo el solemne Te Deum, que se interpreta cada 9 d'Octubre en conmemoración de la conversión al cristianismo del Reino de Valencia, en exactamente el mismo día del año 1238, tras la entrada de Jaume I en la localidad, en el momento en que fue dedicada y consagrada a la Asunción de María la Catedral.

   Cerca de 30 cantores de la Coral Catedralicia, bajo la dirección de Luis Garrido, ha interpretado este himno de acción de gracias, compuesto en 1994 por quien fuera canónigo prefecto de música sagrada de la Catedral y directivo honorífico de la Coral, José Climent.