Crónica Valencia.

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Catalá pide evaluar infraestructuras y el nuevo cauce del Túria tras la dana.

Catalá pide evaluar infraestructuras y el nuevo cauce del Túria tras la dana.

VALÈNCIA, 11 de enero. En la última jornada, la alcaldesa de València, María José Catalá, hizo un llamado a la reflexión sobre las infraestructuras de la ciudad y la provincia. Esta petición surge como consecuencia de la fuerte dana que impactó la región el pasado 29 de octubre, la cual dejó importantes daños materiales y un estado de alerta en la población. Catalá, en sus declaraciones, enfatizó la necesidad de evaluar la capacidad del nuevo cauce del río Túria, que aunque no llegó a desbordarse, se encontró en niveles críticos durante el evento climático.

La primera edil de València realizó estas afirmaciones este sábado, tras su visita a las labores de limpieza de la playa de El Saler. Su atención se centró, particularmente, en los vertidos de aguas fecales que han afectado el río, provenientes de la depuradora de Quart Benager. La situación es preocupante, ya que estos vertidos son el resultado de una depuradora que, según indicó Catalá, fue "fuertemente afectada" por la dana, quedando "prácticamente inutilizada", mientras que las localidades continúan utilizando su alcantarillado, abrumando la planta de depuración.

La alcaldesa dejó claro que este asunto ha sido comunicado a la Conselleria, el organismo encargado de gestionar la situación. Afirmó que están trabajando de manera eficiente para encontrar una solución rápida que elimine los vertidos contaminantes del río, un tema que ciertamente genera inquietud en la población local.

En este contexto, Catalá insistió en la importancia de iniciar un análisis exhaustivo sobre las infraestructuras en general, abarcando tanto las depuradoras como el funcionamiento del nuevo cauce del río y su resiliencia ante situaciones extremas. La alcaldesa subrayó que es necesario realizar una "reflexión profunda" sobre qué infraestructuras hidrológicas son necesarias para el futuro, con el objetivo de prevenir la repetición de desastres como el ocurrido en la fecha mencionada.

Cuando se le preguntó si creía que el nuevo cauce del río ha resultado insuficiente, Catalá respondió que, aunque no se desbordó, "iba demasiado lleno" y que los bomberos llegaron a temer por un desbordamiento inminente en ciertos momentos críticos. Este aspecto genera inquietud y llama a la necesidad de considerar intervenciones específicas, tales como la canalización de la zona del barranco del Poyo hacia el nuevo cauce del río, lo que podría requerir una evaluación de su capacidad y, posiblemente, la inversión en más infraestructuras que puedan aliviar esta presión hídrica.