VALÈNCIA, 23 Nov. — Este sábado, la Comunitat Valenciana se despierta bajo un manto de cielos nubosos, con la posibilidad de chubascos que afectarán especialmente al tercio sur del territorio. No se descartan también precipitaciones débiles y dispersas que podrían registrarse en el interior de la comunidad, lo que sugiere un cambio en la estabilidad atmosférica que hemos experimentado en días anteriores.

La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ha emitido su pronóstico, detallando que durante la jornada se espera un viento de carácter flojo y variable, aunque con una clara tendencia hacia la componente sur en la tarde. Este cambio en el viento puede influir en la sensación térmica y en la dispersión de las nubes que ahora cubren el cielo valenciano.

En lo que respecta a las temperaturas, se prevé un ligero descenso o, en su defecto, una estabilización de las mismas. En la provincia de Castellón, se anticipa que los termómetros marquen hasta 18º de máxima en localidades como Castelló de la Plana, la Vall d'Uixó y Vinaròs, mientras que en Morella las temperaturas máximas alcanzarán solo 14º. Las mínimas también variarán, con temperaturas que podrán bajar hasta 2º en Morella, y no superar los 11º en Castelló de la Plana y la Vall d'Uixó.

En la capital provincial, Valencia, las máximas serán más cálidas, alcanzando los 21º en València y Gandia, 19º en Ontinyent y 17º en Requena. Las mínimas oscilarán entre los 8º de Requena y los 14º en València, ofreciendo un contraste notable en el clima de la región.

Por su parte, en la provincia de Alicante, se esperan máximas de 21º en Dénia, y 20º en ciudades como Alicante, Elche y Orihuela, mientras que Alcoi alcanzará solo 17º. Las mínimas en esta provincia se situarán en 10º en Alcoi, 14º en Dénia, y 15º en Orihuela y Elche, con Alicante alcanzando un mínimo de 16º.

Finalmente, es importante destacar que el Centro de Coordinación de Emergencias de la Generalitat ha decretado el nivel de preemergencia por riesgo de incendios extremo en toda la Comunitat Valenciana. Bajo este nivel 3, queda estrictamente prohibido realizar cualquier tipo de fuego, lo que se convierte en una medida crucial para la protección del entorno natural y la seguridad de los ciudadanos en un contexto climático potencialmente riesgoso.