Crónica Valencia.

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El Hospital de Manises comienza su gestión pública con gran plantilla y presupuesto generoso.

El Hospital de Manises comienza su gestión pública con gran plantilla y presupuesto generoso.

Los pacientes y usuarios del Hospital de Manises ven positivo el cambio en la gestión, aunque alertan sobre la posibilidad de un aumento de la cantidad de personas atendidas: "Si ya estamos 12 horas, ahora van a ser 24", advierten.

VALÈNCIA, 7 May.

El Hospital de Manises (Valencia) ha comenzado una nueva etapa tras la asunción directa de la gestión por parte de la Conselleria de Sanidad al finalizar el contrato de concesión. Con un presupuesto de 114 millones de euros, el centro contará con 2.560 trabajadores.

Este departamento se incorporará a la Agrupación Sanitaria Interdepartamental (ASI) Valencia-Oeste, junto con el Hospital General de València y el de Requena.

La nueva plantilla estará compuesta por 1.831 profesionales subrogados, 431 nuevas plazas y 298 profesionales de la Conselleria. El conseller de Sanidad, Marciano Gómez, ha destacado el aumento del 20,24% en la plantilla para cubrir la demanda asistencial de la población.

Gómez resaltó el proceso planificado y ordenado de cambio de gestión desde que se comunicó la finalización del contrato en octubre. Agradeció a la empresa concesionaria y al personal su colaboración en una transición "fluida, generosa y sin incidentes".

El titular de Sanidad señaló que comienza una nueva etapa en el hospital, enmarcada en una estrategia de gestión junto al Hospital General de València y Requena. La cartera de servicios se adaptará a las necesidades de los ciudadanos, según Gómez.

Se confirmó la integración del personal del laboratorio como laboral a extinguir. Beatriz Gómez será la nueva gerente y se anunciaron inversiones en el Centro Sanitario Integral de Buñol y el nuevo centro de salud de Riba-roja.

Los pacientes del Hospital de Manises han recibido con satisfacción el cambio, aunque alertan sobre un posible aumento en la demanda de servicios. Algunos temen que la falta de personal afecte la calidad de la atención, mientras otros esperan una reducción en las listas de espera. Cada uno de ellos expresó sus opiniones a los medios de comunicación.