Mazón y Page aseguran atención sanitaria a vecinos de zonas limítrofes

Valoran la necesidad de armonizar las tecnologías sanitarias entre las Comunidades Autónomas para eliminar obstáculos y progresar en la coordinación.

VALÈNCIA, 15 May.

El presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, y el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, han rubricado en Requena un convenio para la atención sanitaria en zonas limítrofes que beneficiará a 13.778 residentes de cinco municipios del Valle de Ayora y 22 localidades de Cuenca. Esta medida entra en vigor de inmediato y Mazón ha expresado su interés en lograr un acuerdo similar con otras regiones fronterizas de la Comunitat Valenciana.

También han acordado colaborar en innovación, formación, docencia e investigación sanitaria, con la presencia del conseller de Sanidad, Marciano Gómez, y el consejero de Sanidad, Jesús Fernández.

Durante el acto, García-Page y Mazón han defendido la importancia de estos convenios para mejorar los servicios públicos en beneficio de los ciudadanos, superando las fronteras y apostando por la unificación de las tecnologías sanitarias entre las comunidades para lograr una coordinación efectiva.

García-Page ha insistido en la necesidad de un Plan de armonización técnica en el ámbito sanitario, que se aborde en el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud o en una Conferencia de Presidentes, con el objetivo de contar con un sistema sanitario nacional, a pesar de la gestión autonómica. Ha destacado que no tiene sentido que una radiografía tomada en Sanxenxo no pueda visualizarse en Alicante o en Alcañiz, y ha abogado por la unificación de la tarjeta sanitaria.

Asimismo, ha señalado que, aunque la transferencia de competencias del Insalud a las comunidades ha sido positiva, es responsabilidad de la Administración del Estado, no del gobierno en turno, armonizar los servicios para eliminar las barreras tecnológicas. Ha subrayado la necesidad de corregir la descentralización que ha llevado a que cada comunidad desarrolle su propio sistema tecnológico, generando obstáculos que deben ser superados.

Mazón, por su parte, ha coincidido en que estos acuerdos se centran en mejorar el servicio sanitario a los ciudadanos, poniendo al receptor del servicio por encima de rivalidades políticas. Ha defendido una coordinación entre las comunidades en lugar de una competición, destacando que la competencia debe ser una herramienta para brindar un buen servicio, no una excusa para dividir. Ha destacado la urgencia de una reforma en el sistema de financiación para garantizar la calidad de los servicios públicos.

El convenio abarca la atención especializada de primer y segundo nivel, así como farmacia hospitalaria, recetas, atención de emergencias y transporte sanitario urgente y no urgente en zonas limítrofes entre ambas regiones.

En particular, los residentes en el Valle de Ayora y en 22 localidades de Cuenca tendrán acceso al Hospital de Almansa y al Hospital de Requena respectivamente, como centros de referencia para la atención sanitaria especializada. La atención especializada de mayor complejidad se realizará en los centros de referencia de la Comunitat Valenciana o Castilla-La Mancha, en igualdad de condiciones para los ciudadanos de ambas regiones.

La coordinación de urgencias y emergencias determinará los medios a emplear para el transporte sanitario urgente, mientras que el transporte no urgente se realizará por la región de residencia del paciente, pero garantizado por ambas comunidades en caso de dificultades. El acuerdo también contempla la dispensación de fármacos y productos de farmacia hospitalaria en el hospital donde se receta, así como el acceso a historias clínicas electrónicas y medidas de identificación clínica personal.

Además, ambas comunidades promoverán la cooperación en docencia, formación e investigación en materia sanitaria, en beneficio de sus habitantes.