VALÈNCIA, 1 de noviembre

Varios municipios de la provincia de Valencia se encuentran enfrentando una situación crítica, ya que no cuentan con suministro de agua potable. Ante esta emergencia, los ayuntamientos han tenido que implementar medidas extraordinarias, como el reparto de agua en las calles y la distribución puerta a puerta, con el objetivo de garantizar un acceso mínimo al vital líquido. En este sentido, se ha solicitado a la ciudadanía hacer un uso responsable del agua y evitar acopiar.

En Picanya, se ha establecido un sistema constante y permanente de reparto de agua y alimentos desde vehículos municipales, con sonidos de sirenas y megafonía para alertar a los residentes. Se hace un llamado a la calma y a usar el recurso de manera cuidadosa. En Catarroja, el reparto de agua potable se realiza en puntos estratégicos, y se han habilitado teléfonos de contacto para brindar apoyo sanitario y atención médica.

Por otra parte, en Pedralba se ha informado que el suministro de agua no es apto para consumo, por lo que se han dispuesto espacios para el acceso a agua embotellada, productos básicos y servicios de higiene. En Albal, se ha habilitado un camión cisterna con agua potable para que los vecinos puedan rellenar recipientes, solicitando la colaboración de todos para asegurar que el recurso llegue a la mayor cantidad posible de personas.

En Llombai, continúan los problemas con el suministro de agua y electricidad en ciertas zonas, mientras que en Paiporta se está realizando un reparto puerta a puerta para aquellas personas con movilidad reducida. La gestión de restablecimiento de la red de agua está en marcha, con la promesa de recuperar la normalidad lo antes posible. Los camiones cisterna se encuentran disponibles en puntos estratégicos del municipio.