En una cifra considerada "histórica", la Conselleria de Medio Ambiente, Agua, Infraestructuras y Territorio ha anunciado que se han contabilizado un total de 645 parejas de buitre leonado en la Comunitat Valenciana durante el año 2023. Este logro se atribuye al éxito de los planes de conservación y recuperación implementados para esta especie, la cual está incluida en la Directiva de Aves y en el Listado de Especies en Régimen de Protección Especial.
En el pasado, el buitre leonado estuvo al borde de la extinción en la Comunitat Valenciana, con tan solo tres parejas aisladas en el norte de Castellón en la década de los 70. Sin embargo, en la actualidad, la población se ha expandido y se reproduce en las tres provincias de la región, según destacó la Generalitat en un comunicado.
Desde 1990, el personal de la Conselleria de Medio Ambiente se ha encargado de censar la población nidificante de buitre leonado en la provincia de Castellón, realizando un seguimiento de campo y coordinando la información recibida.
Durante el año 2023, se han identificado 84 puntos de nidificación y se han contabilizado un total de 477 parejas reproductoras. Además, se ha estimado un éxito reproductor en 68 colonias diferentes, con un total de 450 parejas. Se han registrado 284 pollos, lo que arroja un valor de 0.63 pollos por pareja, una cifra superior a la del año anterior.
El director general de Medio Natural y Animal, Raúl Mérida, señaló que en 2011 se documentó la primera reproducción de buitres en la provincia de Valencia, con una pareja en Tuéjar. Desde entonces, el número de parejas ha ido en aumento en la comarca de La Serranía, donde la especie se había extinguido como nidificante en las décadas anteriores.
Además, se ha observado la reproducción de esta especie en Chera, cerca del embalse de Buseo, con una pareja reproductora, lo que suma a la población de buitres en la provincia de Valencia. El censo actual estima un total de 139 parejas, superando las cifras del año anterior.
Por último, en la provincia de Alicante, gracias a un programa de reintroducción iniciado por la asociación FAPAS-Alcoi en el año 2000, el buitre leonado volvió a nidificar en la región en 2004. Desde entonces, la población ha ido en aumento y se ha establecido en distintos puntos cercanos a Alcoy, expandiéndose hacia el sur.
Se ha registrado una ligera recuperación en la población de buitres en la provincia de Alicante, luego de un descenso progresivo en la última década. Se han formado dos colonias nuevas, cada una con tres parejas, sumando al éxito de la conservación de esta emblemática especie en la Comunitat Valenciana.
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