La represión franquista en Valencia: el testimonio de sus víctimas

Valencia es una ciudad con una larga historia que abarca desde la época romana hasta la actualidad. Durante la Guerra Civil española, la ciudad vivió uno de sus momentos más trágicos, al igual que el resto del país. El resultado final fue la victoria del bando franquista y la instauración de una dictadura que duraría varias décadas.

Durante la época franquista, la represión fue una realidad constante en España. Valencia no fue una excepción y muchas personas fueron víctimas de la represión política y social del régimen. Desde la llegada de las tropas franquistas, se inició una campaña para acabar con todo lo que quedaba del antiguo régimen y para eliminar a los elementos que se consideraban peligrosos para el nuevo orden.

En los primeros meses de la posguerra, las ejecuciones extrajudiciales eran algo demasiado común en Valencia. Se calcula que alrededor de 10.000 personas fueron fusiladas en la ciudad durante el periodo que va desde el final de la guerra hasta 1943. La mayoría de ellas eran hombres, pero también hubo mujeres y niños que fueron víctimas de la represión.

La represión franquista se centró principalmente en los sectores políticos y sociales que habían apoyado al bando republicano durante la guerra civil. Los sindicatos, los partidos políticos, las asociaciones culturales y las organizaciones no gubernamentales fueron disueltas y sus miembros fueron perseguidos. Además de la represión, que en ocasiones incluyó torturas y otros abusos, los familiares de los represaliados también sufrían las consecuencias de vivir bajo el régimen franquista.

A partir de la década de 1960, la represión fue dando paso a una cierta apertura política y social. A pesar de ello, muchas personas se quedaron sin la posibilidad de recuperar todo lo que habían perdido en la dictadura. Y es que la represión franquista en Valencia dejó secuelas que han tardado décadas en ir remitiendo.

Hoy en día, la ciudad es un lugar de encuentro para las víctimas de la represión y sus familiares. Las asociaciones de memoria histórica se han convertido en un elemento fundamental para visibilizar la represión franquista en Valencia y para pedir reparación a las víctimas y sus familiares. Estas asociaciones han logrado poner en marcha iniciativas que permiten recuperar la memoria de los represaliados, como la creación de un mapa de las fosas comunes donde fueron enterradas las víctimas de la represión en Valencia y en otras localidades de la provincia.

Pero, sin duda, el testimonio de las víctimas es el elemento que aporta mayor valor al trabajo de las asociaciones de memoria histórica. Muchas de estas personas han sido capaces de superar el miedo y el dolor que les causó la represión y han compartido sus experiencias para que no se olvide lo que sucedió. Los testimonios de estas personas, recogidos en entrevistas y en documentales, nos permiten conocer de primera mano lo que fue vivir bajo la dictadura franquista en Valencia.

En conclusión, la represión franquista en Valencia dejó una huella imborrable en la ciudad y en sus habitantes. Las víctimas de la represión y sus familiares han sufrido las consecuencias de la dictadura durante décadas. Aunque aún queda mucho por hacer, las asociaciones de memoria histórica han logrado avances significativos en la recuperación de la memoria y en la reparación a las víctimas. Gracias al testimonio de estas personas, podemos conocer su historia y visibilizar la represión franquista en Valencia y en España.