La alcaldesa del PP de València, María José Catalá, ha dado a conocer la estructura del gobierno municipal, que consta de diez grandes áreas más una de Alcaldía. Vox no estará presente en este ejecutivo, pero se considera un "socio preferente".

Esta nueva configuración del gobierno tiene como objetivo simplificar, coordinar y mejorar la eficiencia de los servicios municipales. Los 13 concejales del PP estarán al frente de las concejalías, llevando en muchos casos más de una delegación.

Entre las novedades, se crea una dirección general de personas con discapacidad y una oficina de bienestar social dentro de la delegación de Sanidad y Consumo. Además, las delegaciones de Movilidad y Seguridad Ciudadana estarán dentro de una misma área y se creará un servicio de Registro y Población para coordinar el padrón municipal.

La alcaldesa defiende que este gobierno es sólido y eficiente, capaz de desbloquear muchas cuestiones pendientes en el Ayuntamiento. Se han encontrado delegaciones sin una verdadera estructura organizativa y asuntos atascados, como las licencias de actividad y obras, que dependían de concejalías distintas.

Para solucionar estos problemas, se unificarán las direcciones generales de licencias y obras y se creará un servicio de Registro y Población. La alcaldesa asegura que esta estructura se debe a la visión y forma de trabajar de su gobierno, sin imposiciones de nadie.

En cuanto a las competencias concretas, se han repartido entre los concejales del PP. Vox será un "socio preferente" y respaldará esta nueva organización del gobierno municipal.

La alcaldesa niega que el cambio de nombre de algunas concejalías, como la de Derechos LGTBI, encaje en las exigencias de Vox. Se han realizado cambios para simplificar y facilitar la identificación de las concejalías.

La delegación de Igualdad seguirá trabajando en defensa de los derechos LGTBI y el gobierno tiene un compromiso claro en este tema. También se han respondido a las críticas de la oposición sobre la reducción de su presencia en comisiones y del número de preguntas y mociones en los plenos, alegando que estas decisiones fueron aprobadas por Compromís y PSPV en el reglamento de organización del pleno.

Respecto a la ubicación de los grupos de la oposición, se ha basado en ofrecer espacios de acuerdo a la representación, asignando metros cuadrados y despachos según el número de concejales de cada partido.

Finalmente, el cambio de fecha de los plenos de jueves a martes se debe a la celebración de bodas que dificultaban las funciones de los concejales a cargo de ellas. La alcaldesa asegura que ha cumplido sus obligaciones en Les Corts con solvencia y también lo podrá hacer en este caso.