El Tribunal Supremo ha dado luz verde a las intervenciones telefónicas en el caso conocido como 'Caso Brugal' y ha ordenado que se dicte una nueva sentencia teniendo en cuenta las pruebas que previamente se habían descartado como nulas.

El fallo se produce después de que la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo revocara las absoluciones de los 34 acusados en la causa principal del 'Caso Brugal' y devolviera el caso a la Audiencia de Alicante para que emita una nueva sentencia considerando las pruebas relevantes que anteriormente se habían desestimado.

La decisión del Supremo, fechada el 22 de julio, invalida la sentencia previa y ordena que la Audiencia de Alicante reconsidere el caso y emita una nueva sentencia que incluya las pruebas previamente excluidas como inválidas.

Tras analizar numerosos autos, el Tribunal Supremo ha determinado que las intervenciones telefónicas en este caso son válidas y que los registros que se habían descartado como inválidos también son admisibles como pruebas válidas. Se ha determinado que los acusados no sufrieron indefensión por el protocolo de acceso a las grabaciones telefónicas y se ha reconocido su valor probatorio.

La Sala del Tribunal Supremo ha explicado que el sistema SITEL utilizado en este caso proporciona garantías suficientes para la validez de las intervenciones telefónicas y que cuestionar su autenticidad sin pruebas que lo desmientan es infundado.

En resumen, el Tribunal Supremo ha considerado que la Audiencia de Alicante ha cometido errores al expulsar pruebas válidas propuestas por el Ministerio Fiscal, vulnerando así el derecho a la tutela judicial efectiva y el uso de medios de prueba adecuados.

El Supremo ha ordenado la realización de una nueva deliberación y redacción de la sentencia por parte de la Audiencia de Alicante, esta vez tomando en cuenta todas las pruebas disponibles y analizando detenidamente cada acusación.

A pesar de la petición de la Fiscalía de un nuevo juicio con otro tribunal, el Tribunal ha decidido que no es necesario un nuevo enjuiciamiento y que el caso debe ser revisado por el mismo tribunal que lo ha llevado hasta ahora. Se ha destacado la importancia del uso de material audiovisual y documental para garantizar un proceso justo.

En junio de 2020, la Audiencia de Alicante absolvió a los 34 acusados en el caso Brugal, pero ahora, tras la decisión del Tribunal Supremo, se espera una nueva resolución que tome en cuenta todas las pruebas disponibles y garantice un análisis completo de la situación.