Las intensas lluvias generadas por la dana Alice han causado serios inconvenientes en la movilidad de la Comunidad Valenciana. Desde la mañana de hoy se ha reportado la interrupción del servicio en la línea 1 de Metrovalencia, que conecta Torrent y Picassent, con retrasos significativos en la circulación de trenes.

En València, este 11 de octubre, las condiciones meteorológicas han llevado a la toma de medidas drásticas en la infraestructura vial. Según fuentes del Centro de Gestión de Tráfico, varias carreteras han sido cerradas al tráfico debido a las inundaciones, afectando, entre otras, a la autopista AP-7 en la zona de Pilar de la Horadada y a la carretera CV-525 que une Alginet con Algemesí.

La situación en la AP-7 es crítica; el túnel que conecta con Murcia, específicamente en el tramo del kilómetro 770 al 773, permanece cerrado por acumulación de agua. Además, el carril derecho en sentido Valencia continúa sin acceso, aunque el carril izquierdo ha podido ser reabierto.

Asimismo, la carretera CV-525 ha sido objeto de cortes en ambos sentidos, abarcando desde los kilómetros 0 hasta 5, a causa de las inundaciones que dificultan el tránsito. A este panorama se suma el cierre temporal de la CV-598 en Montesa y de la V-30 a la altura de Paterna, aunque ambas vías han vuelto a ser habilitadas tras las mejoras en las condiciones.

La red de Metrovalencia no ha sido ajena a este fenómeno. Ya a primera hora de la mañana se detectaron interrupciones en la línea 3, específicamente entre Meliana y Foios, aunque el servicio fue restablecido cerca de una hora después. Posteriormente, también se registró una parada en la línea 1 entre Empalme y Bétera, debido a la acumulación de agua sobre las vías.

A pesar de que las líneas 1 y 2 del metro, así como la línea 6 del tranvía, están en funcionamiento, los usuarios están experimentando retrasos que generan una considerable frustración en la comunidad. Las autoridades piden paciencia y comprensión mientras se manejan las consecuencias de estas inusuales precipitaciones.