Los socialistas han criticado al presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, acusándolo de haber dejado a Alberto Núñez Feijóo en una situación comprometida, presentándolo ante la opinión pública como un mentiroso, debido al polémico listado de llamadas relacionado con la tormenta del 29 de octubre del año pasado.
En una tanda de declaraciones realizadas en Valencia, Mazón expresó su satisfacción porque, por primera vez en casi un año, el PSPV no ha solicitado su dimisión ni ha exigido nuevas elecciones en la Comunidad Valenciana. El mandatario señaló que esto refleja un desgaste en la estrategia de los socialistas y elogió la labor de su gobierno, destacando las ayudas que están en marcha para los afectados por las recientes inundaciones.
Durante la última sesión de control en Les Corts, el líder del PSPV, José Muñoz, arremetió contra el Gobierno popular, citando una frase sobre la legalidad de mentir y manifestando su descontento con la gestión de Mazón. Muñoz, refiriéndose a la cantidad de versiones que ha dado Mazón sobre un almuerzo, le acusó de faltar a la verdad en múltiples ocasiones, lo cual, según él, ha debilitado su posición.
Muñoz insinuó que Mazón evitará comparecer ante la jueza que investiga la gestión de la crisis de la dana, ya que en ese contexto se vería obligado a decir la verdad. Además, señaló que en una reciente entrevista, Mazón restó importancia a su papel en la activación de los servicios de emergencia, lo que, a su juicio, refuerza su falta de liderazgo.
El presidente de la Generalitat, en respuesta, evitó entrar en el debate sobre la gestión de crisis y en su lugar, envió un saludo a María Corina Machado, reciente ganadora del Premio Nobel de la Paz. Preguntó a Muñoz si había reconocido que el ex presidente Ximo Puig fue responsable de la activación de ciertos dispositivos necesarios durante la crisis.
Muñoz no tardó en corregir a Mazón, insistiendo en que la responsabilidad de las muertes en la dana recaía en él. Además, volvió a señalar que en el listado de llamadas que Mazón había presentado había ausencias significativas, incluyendo una llamada crucial que pudo haber sido omitida, sugiriendo que esto podría representar un delito de falsedad documental.
El socialista también se centró en la conversación que Mazón tuvo con Feijóo tras el escándalo, acusándolo de haber dejado al líder del PP en una situación de deshonra a nivel nacional. Muñoz hizo hincapié en que tanto Mazón como Feijóo comparten la misma acusación: la de ser considerados mentirosos.
El intercambio entre ambos políticos continuó, con Muñoz afirmando que a pesar de la gravedad de la situación, nadie ha exigido la dimisión de Mazón, lo que él considera un escándalo. Exigió un gesto de dignidad política por parte del presidente valenciano, sugiriendo que su renuncia sería el único acto que podría redimirlo.
Con una actitud defensiva, Mazón decidió no hacer referencia a las situaciones judiciales que rodean a algunos políticos de su entorno y cargó contra Muñoz, señalando la situación compleja de su propio partido. Afirmó que la realidad política muestra que finalmente hay un plan de financiación para universidades, y que se han cumplido los compromisos con las ayudas a los afectados por la crisis.
Por otro lado, Mazón observó irónicamente que los socialistas otorgan gran importancia a encuestas que reflejan su pérdida de apoyo, haciendo referencia a que el PP y Vox están aumentando su caudal de votos. Cuestionó la gestión de oposición de los socialistas, subrayando que todos los sondeos apuntan a un triunfo inminente del PP en las elecciones autonómicas.
Finalmente, Mazón destacó la visión negativa que los ciudadanos tienen de la oposición y concluyó que la gestión de su gobierno no está en la peor posición, pues el peor evaluado resulta ser el propio PSPV por su constante falta de veracidad y por propagar bulos. La contienda política se intensifica en un contexto donde las responsabilidades y las valoraciones están a la orden del día.
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