VALÈNCIA, 28 de noviembre. Las autoridades de la provincia han anunciado la reapertura al tráfico del último trecho de la carretera CV-50, un paso decisivo tras los estragos ocasionados por la reciente dana. Este regreso a la normalidad en la circulación coincide con el restablecimiento de 17 de las 18 carreteras que resultaron afectadas por la riada de calamidad que tuvo lugar el pasado 29 de octubre en la región valenciana.
El Centro de Coordinación Operativa Integrado (Cecopi) confirmó esta información en su actualización de las 21:00 horas de este jueves, indicando que el tramo de la CV-50 que ahora se habilita es fundamental para conectar las localidades de Cheste, Vilamarxant y Real, garantizando así la movilidad de los residentes y el transporte de bienes en esa área.
Las carreteras que han recuperado su funcionamiento son la CV-10, CV-124, CV-125, CV-148, CV-15, CV-170, CV-194, CV-33, CV-35, CV-390, CV-400, CV-403, CV-41, CV-42, CV-43, CV-407 y, por último, la CV-50. Sin embargo, aún persisten las labores en la CV-36, que sigue cerrada al tráfico y en proceso de reparación.
Adicionalmente, se ha puesto en servicio un puente provisional en la CV-50, dentro del municipio de Cheste. Esta apertura se produjo tras concluir los trabajos de construcción de las rampas de acceso y la correspondiente señalización, que permitirán una mejor circulación en la zona afectada.
Durante esta jornada, el despliegue de efectivos fue significativo. En total, 743 bomberos, provenientes de diversas instituciones, están trabajando en la zona, complementados por 8.499 miembros del Ejército, de los cuales 2.103 forman parte de la Unidad Militar de Emergencias (UME). A esto se suman más de 800 voluntarios de Protección Civil de diversas comunidades autónomas que se han trasladado para ofrecer su ayuda.
En el área de seguridad ciudadana, un contingente de 9.728 agentes, incluyendo policías nacionales y guardias civiles, se encuentran en pleno despliegue, junto a 292 efectivos de varias policías locales y más de 130 agentes de la Policía de la Generalitat, todos ellos comprometidos con la protección de los ciudadanos durante esta crisis.
Este jueves también se puso en marcha un operativo que contó con 156 camiones encargados de la extracción de lodo en las labores de desobstrucción del alcantarillado. El plan para retirar 120.000 vehículos de la zona avanza "a buen ritmo", mientras que se han llevado a cabo 144 apuntalamientos de edificios en las áreas afectadas, encontrándose esta fase "casi completada".
En lo que respecta a las operaciones en curso, continúan las búsquedas y rescates de posibles víctimas en zonas como l'Albufera, marjales y otras áreas terrestres, incluyendo el barranco del Poyo, Loriguilla, Sot de Chera y Montserrat.
Por último, los trabajos para la extracción del agua estancada persisten, así como las reparaciones de las bajantes de aguas residuales que han sufrido roturas o fugas, además de la limpieza y retirada de vehículos y la atención a los espacios de acceso, tales como los huecos de ascensores afectados.
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