En la capital española, Madrid, el día 13 de noviembre, se desató un intenso debate en torno a la gestión de situaciones de crisis por parte de las autoridades autonómicas. La ministra de Defensa, Margarita Robles, no dudó en criticar duramente al presidente de la Generalitat valenciana, Carlos Mazón, por su comportamiento durante la DANA, el fenómeno climático que devastó gran parte de la provincia de Valencia el pasado 29 de octubre.
Durante su comparecencia en el Senado, donde se discutió la actuación del Ministerio de Defensa ante la crisis provocada por la DANA, Robles cuestionó el tiempo que Mazón dedicó a una comida en lugar de centrarse en la gestión de la emergencia. En un tono de reproche, planteó a los miembros del Partido Popular si consideraban apropiado que las comidas se prolonguen cuando se enfrenta a una situación de tal gravedad.
Para dar contexto a sus críticas, fue revelado que Carlos Mazón, líder del PP en la Comunidad Valenciana, se encontraba degustando un almuerzo con la periodista Maribel Vilaplana el mismo día en que el temporal causaba estragos. Esta reunión, que tenía por objeto discutir la dirección de la televisión autonómica, fue defendida por fuentes de la Generalitat, pero suscitó preguntas sobre la prioridad que se le otorga a la política frente a la gestión de emergencias.
La ministra Robles no escatimó en señalar la irresponsabilidad de Mazón, interrogando directamente: "¿Usted cree razonable que quien está al mando de una comunidad puede estar en una comida mucho más tiempo de lo necesario para tomar decisiones?". Este cuestionamiento pretende resaltar la importancia de la prontitud y el compromiso de los líderes en momentos críticos.
Además, la ministra hizo una reflexión más amplia sobre la duración de las comidas y las sobremesas, enfatizando que deben ser lo suficientemente breves como para no afectar la capacidad de decidir en situaciones apremiantes. "Las comidas han de durar el tiempo necesario, porque muy largas tampoco son buenas ni para las digestiones ni para tomar decisiones", afirmó con firmeza.
Finalmente, Robles dirigió sus críticas a la senadora del PP, Eva Ortiz, resaltando que su partido apoya a un gobierno autonómico que en situaciones críticas se encuentra distraído en banquetes. "Eso es muy grave", concluyó la ministra, dejando claro que el deber de un líder es estar presente y activo en la resolución de las crisis que afectan a los ciudadanos.
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