Satse pide a Sanidad revocar instrucción sobre enfermera referente escolar.

En una reciente declaración, se ha dejado en claro que no se tiene la intención de crear plazas de enfermeras escolares, y en su lugar se designarán a dedo en los centros de salud si no se encuentran voluntarias.

VALÈNCIA, 12 Sep.

Satse ha interpuesto un recurso de reposición ante la Conselleria de Sanidad exigiendo la detención de la instrucción que establece la figura de la enfermera referente escolar (ERE) y que incluye entre sus tareas la de enseñar a los profesores a administrar medicamentos, aspecto que, según el sindicato de Enfermería, va más allá de las competencias de los docentes y no está respaldado por ninguna normativa legal en la Comunitat.

En el comunicado emitido al respecto, Satse muestra su preocupación frente a la instrucción, haciendo hincapié en la presunta responsabilidad del personal docente en la administración de medicamentos, como se desprende de frases como "en caso de que el alumno necesite tomar una medicación durante su permanencia en el centro, para su administración por el personal docente": "la ERE colaborará en la resolución de dudas sobre la administración de medicamento", o la "administración de medicación por personal docente no sanitario".

Por otra parte, Satse advierte que parece que la instrucción busca evitar que la ERE se desplace del centro de salud al centro educativo durante el curso escolar y en horario lectivo.

En este sentido, la crítica principal recae en que la iniciativa de la enfermera escolar solo implicará que las enfermeras de los centros de salud incrementen su carga de trabajo al asesorar a los profesores en la administración de medicamentos.

Por lo tanto, se revela que la Conselleria no tiene planeado crear las 300 plazas de enfermeras escolares, y en su lugar está buscando enfermeras voluntarias en los centros de salud, estableciendo que de no encontrarlas se harán designaciones a dedo.

En consecuencia, Satse destaca que la falta de enfermeras no es la razón detrás de esta decisión, ya que para finales de septiembre todas las enfermeras contratadas para cubrir las sustituciones de verano cesarán, insinuando que el motivo real es la falta de voluntad para llevar a cabo el proceso.

En este sentido, surgen dudas sobre el horario de atención de estas enfermeras escolares, el impacto en la asistencia sanitaria que brindan y si se distribuirá el cupo de pacientes entre el resto de sus compañeras, generando una sobrecarga laboral y un deterioro en la asistencia sanitaria.

Ante este panorama, Satse se pregunta por los 15 millones destinados para contratar a las 300 enfermeras escolares prometidas por la Conselleria de Sanidad desde hace un año, evidenciando una presunta falta de transparencia en el uso de los recursos.

Además, se apunta que la instrucción incluye un 'Modelo de autorización del padre, madre o tutor legal y solicitud a la persona responsable de la dirección del centro para suministrar medicación u otra atención sanitaria en horario escolar', lo que refuerza la idea de que se espera que padres firmen su consentimiento para una práctica que debería ser responsabilidad de la enfermera escolar.

Satse sostiene que este problema generado por la Conselleria de Sanidad no solo impacta a los profesionales de enfermería, sino también a los ciudadanos, quienes verán deteriorada la atención en sus centros de salud debido a la mayor presión asistencial por la escasez de recursos profesionales.

Además, se anticipa que representará un desafío para los padres de niños con enfermedades crónicas, quienes seguirán sin tener una enfermera que cuide de sus hijos durante el horario escolar, atienda en urgencias y les oriente en la prevención de enfermedades.

El sindicato de Enfermería recuerda al conseller, Marciano Gómez, la importancia de cumplir con los compromisos adquiridos tanto con la ciudadanía como con los profesionales sanitarios que trabajan para la Conselleria de Sanidad.