Crónica Valencia.

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Sobrevivientes de la dana expresan su gratitud al Congreso por darles voz y ven a Mazón rumbo a la prisión.

Sobrevivientes de la dana expresan su gratitud al Congreso por darles voz y ven a Mazón rumbo a la prisión.

El pasado martes, Rosa Álvarez, presidenta de la Asociación de Víctimas Mortales 29O, se presentó ante una comisión del Congreso encargada de investigar la gestión de la reciente tragedia provocada por una dana. Durante su intervención, Álvarez no dudó en afirmar que, aunque la renuncia del presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, no puede aliviar su sufrimiento, sí representa un “alivio” y la posibilidad de que se procure justicia, vislumbrando un futuro donde los responsables enfrenten las consecuencias de sus actos.

En su discurso, Álvarez expresó gratitud por el establecimiento de esta comisión, a pesar de la oposición del PP y Vox, y celebró la decisión de ceder a las víctimas el turno de palabra. Esto, según ella, contribuye a restaurar la confianza en las instituciones y acerca a los afectados a la retribución que buscan.

En comparación con otros foros investigativos, lamentó que en el Senado no hubieran recibido ni una sola citación y que, en la diputación valenciana, su presencia fue solicitada “en el último momento”. Álvarez recordó que durante sesiones previas en las Cortes se les había negado el derecho de ofrecer su versión, hasta que la presión de la opinión pública obligó a las autoridades a rectificar su postura.

La presidenta de la asociación señaló que muchos de los políticos que ocupan cargos en la Comunidad Valenciana tienen la educación y capacidad necesarias para gestionar una crisis, y cuestionó cómo es posible que las instrucciones sobre cómo proteger a los ciudadanos no hayan sido claras durante la emergencia. “No culpo al clima”, afirmó, “sino a la gestión incompetente que precedió a la tragedia, que llegó demasiado tarde.”

A pesar de sus dudas sobre la capacidad de la comisión para llevar a cabo acciones que realmente sancionen a los culpables, Álvarez resaltó que su labor debería enfocarse en evitar que situaciones como esta se repitan en el futuro. Reconoció que la dimisión de Mazón no elimina el sufrimiento de las víctimas, pero sí simboliza un “alivio moral” para quienes han perdido seres queridos y creen que el máximo responsable de la crisis ya no tiene un lugar destacado en la política valenciana.

“Este es un claro ejemplo de que incluso las acciones pequeñas de la gente pueden generar un cambio significativo”, remarcó Álvarez. “La renuncia de Mazón es solo el principio. La segunda etapa es que rinda cuentas. Estamos más cerca que nunca.”

Álvarez se cuestionó cuántas veces más se requerirá que los ciudadanos sufran pérdidas antes de que quienes tienen la responsabilidad asuman sus errores. Esta evocación no solo está centrada en su padre, Manuel ‘El Barbero’, sino en todas las víctimas que no deben ser tratadas como meras estadísticas, ya que eso, opinó, sería como asesinarlas nuevamente.

Manifestó su determinación de continuar luchando para asegurar que la muerte de su padre y de otros no quede libre de consecuencias y para que los políticos de todos los partidos, incluidos aquellos que apoyan a Mazón o restan importancia al cambio climático, escuchen su doloroso testimonio.

Antes de su intervención, Carmen Martínez Ramírez, presidenta de la comisión, expresó su deseo de que su trabajo pueda brindar, si no alivio, al menos justicia a las víctimas. Prometió que la comisión sería un espacio para escuchar y reconocer el sufrimiento de aquellos afectados, buscando aclaraciones sobre lo sucedido en esa jornada trágica y evitando que otros padezcan el mismo dolor y la misma injusticia en el futuro.

Martínez enfatizó que el Congreso tiene un deber moral de escuchar a las víctimas, quienes merecen estar allí debido a su valentía y humanidad. Asimismo, instó a los comisionados a mantener el respeto y la paciencia ante las tensiones que pudieran surgir durante las sesiones, recordándoles lo crucial que sería actuar con responsabilidad.