La polémica ha estallado en torno a las oposiciones docentes en el IES Isabel de Villena en València, donde la celebración de una prueba de triatlón ha generado graves inconvenientes para los aspirantes. El sindicato STEPV ha denunciado condiciones inaceptables durante la realización de la prueba práctica, con ruidos ensordecedores que afectaron la concentración de los futuros docentes.

Según un comunicado del sindicato, los ruidos provenientes de la música, megafonía y vítores del público impidieron a muchos aspirantes prepararse adecuadamente para su examen. La situación se agravó por las altas temperaturas que obligaron a los aspirantes a mantener las ventanas abiertas, dejando entrar el bullicio exterior.

STEPV ha criticado fuertemente a la Conselleria de Educación, acusándola de haber estado al tanto de la coincidencia de los eventos y de no haber actuado a tiempo para cambiar la sede de los exámenes de Formación y Orientación Laboral. En lugar de encontrar una solución viable, el departamento ofreció tapones para los oídos a los opositores, una respuesta que ha sido calificada como inadecuada.

En respuesta a la situación, miembros del sindicato se han presentado en el instituto para evaluar de primera mano las quejas de los aspirantes, quienes manifestaron sus serias dificultades para enfocarse en las pruebas. Durante la visita, también se llevaron a cabo entrevistas con integrantes del tribunal, quienes confirmaron que se habían comunicado las incidencias a la Conselleria.

El sindicato ha anunciado que la próxima semana elevará formalmente las quejas a la Conselleria y se ha comprometido a asistir a aquellos aspirantes que deseen expresar sus preocupaciones sobre las condiciones inadecuadas que enfrentaron durante el examen.

STEPV enfatiza que las oposiciones representan una oportunidad crucial que determina el futuro profesional de los aspirantes. La organización ha calificado de inaceptable la falta de atención de la administración, que debió prever y prevenir esta problemática.

Por su parte, fuentes oficiales de la Conselleria de Educación han explicado que tuvieron conocimiento de la prueba deportiva solo días antes del evento y se comunicaron con las autoridades locales y la federación de triatlón para intentar minimizar el ruido. Aseguran que este sábado se llevaron a cabo nuevas conversaciones para encontrar soluciones.

Según la Conselleria, el cambio de sede se consideró inviable debido a la falta de tiempo para organizarlo y el riesgo potencial de confundir a los aspirantes sobre el lugar donde debían presentarse, un detalle que, según ellos, era fundamental para garantizar la correcta participación en las pruebas.