VALÈNCIA, 23 de noviembre.

La situación en la provincia de Valencia, tras las devastadoras inundaciones ocurridas el 29 de octubre, sigue siendo alarmante. Hasta el momento, el número de expedientes abiertos por denuncias de personas desaparecidas se mantiene en cinco, mientras que el trágico balance de víctimas mortales confirmadas se eleva a 221, sin novedades en estas cifras cruciales.

Este resumen de la situación ha sido proporcionado por el Centro de Integración de Datos (CID), que ha actualizado la información sobre la catástrofe hasta las 20:00 horas del sábado 23 de noviembre, reflejando así el impacto duradero que las lluvias torrenciales han dejado en la región.

De las 221 víctimas fatales contabilizadas, 171 han sido identificadas gracias a huellas dactilares, 46 a través de análisis de ADN y otras cuatro personas fueron reconocidas tras su ingreso en hospitales, donde recibieron atención médica con vida.

El CID opera como un organismo técnico fundamental, compuesto por una Oficina Forense y una Oficina de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. Este equipo incluye agentes capacitados de la Guardia Civil y la Policía Nacional, cuyo principal objetivo es consolidar y evaluar los informes de identificación de los fallecidos en situaciones de alta mortalidad, en cumplimiento del Real Decreto 32/2009.

Además, el CID es el único centro autorizado por un decreto real para ofrecer cifras oficiales al público, mediante la Oficina de Comunicación del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV), enfocándose en el tratamiento médico forense y la investigación policial relacionada con este trágico evento.