Crónica Valencia.

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Desalojo en Catarroja tras DANA; bomberos evalúan daños estructurales.

Desalojo en Catarroja tras DANA; bomberos evalúan daños estructurales.

VALÈNCIA, 12 de noviembre. La localidad de Catarroja, en la provincia de Valencia, se ha visto marcada por un desalojo significativo en una finca que ha mostrado posibles daños a raíz de la reciente DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos). Los efectivos de bomberos están actualmente llevando a cabo una evaluación exhaustiva para determinar si es necesario realizar algún tipo de apuntalamiento en el edificio afectado.

La evacuación de la finca se llevó a cabo a última hora del lunes, según lo informado por el medio Las Provincias. En total, alrededor de 150 vecinos fueron desalojados de las 50 viviendas del inmueble situado en el número 30 de la calle Albal, un proceso que ha generado preocupación en la comunidad local.

La medida de desalojo fue tomada por técnicos municipales, quienes actuaron en coordinación con el Consorcio Provincial de Bomberos. De esta manera, se aseguraron de que se procediera a inspeccionar la estructura y, si fuera necesario, a implementar las labores de apuntalamiento para garantizar la seguridad de los residentes.

En el día de hoy, como ha podido conocer Europa Press, los bomberos continúan revisando el edificio para analizar si existen daños significativos en la cimentación que requieran acciones urgentes. La preocupación de los vecinos es palpable mientras esperan que se realicen las evaluaciones pertinentes.

María José, una de las residentes desalojadas, compartió su experiencia en el programa 'Bon día Comunitat Valenciana' de À Punt. Comentó que la evacuación ocurrió alrededor de las 19 horas del lunes, y que se les indicó que debían llevar solo lo más imprescindible. “Nos preguntamos dónde podríamos ir, y nos dijeron que el Ayuntamiento no podía realojarnos a esa hora, pero que si estábamos en una situación extrema, deberíamos expresarlo”, relató.

Los vecinos afectados lograron abandonar el edificio, y muchos de ellos encontraron refugio en casas de familiares o amigos. María José añadió que la incertidumbre es frustrante: “Estamos esperando a ver qué pasa y si podremos volver. La situación es un poco complicada; hay muchas opiniones contradictorias. El Colegio de Arquitectos indicó un 10% de afectación, pero los técnicos del Ayuntamiento sugirieron que era alrededor del 70%”, explicó.

Otro vecino, Juanjo, también evacuado, insistió en que el garaje de la finca se encuentra “en perfecto estado”, aunque destacó que había un problema relacionado con el agua acumulada, que requería atención urgente. “Desde el 2 de noviembre, pedimos a los bomberos que vinieran a vaciar el agua. Al final, fuimos los vecinos quienes utilizamos una bomba que nos trajeron. La situación habría sido mucho más crítica sin la colaboración de la comunidad”, afirmó.

Finalmente, Alba, otra de las vecinas desalojadas, expresó su descontento con la situación actual. “Esto es vergonzoso. No tengo casa. Estoy aquí con mi perra, mi hija, mi madre y mi sobrina... ¡Ayudadme, por favor! La alcaldesa y el Gobierno se lavan las manos. No tengo un lugar al que ir y con la DANA acechando, estoy realmente angustiada”, lamentó.