VALÈNCIA, 29 de octubre.

En un emotivo acto de tributo a las víctimas de la devastadora dana que azotó varias regiones de España el pasado 29 de octubre de 2024, el rey Felipe VI ha expresado el “cariño de toda España” hacia los afectados. En su conmovedor discurso, enfatizó que la memoria de los 237 fallecidos “nos pertenece a todos y que entre todos debemos y queremos preservar”. “La Reina y yo estamos con vosotros, ahora y siempre”, afirmó con profundidad.

La solemne ceremonia, que tuvo lugar en el marco de un funeral de Estado, contó con la presencia de la reina Letizia y culminó con una ofrenda floral y un minuto de silencio por parte de los asistentes. Durante la ofrenda, varios familiares de las víctimas levantaron fotografías de sus seres queridos como símbolo de recuerdo y homenaje.

Felipe VI recordó los “momentos durísimos” que vivieron las comunidades afectadas por esta tragedia. “Aquella noche, una potente dana golpeó con fuerza a Andalucía, Castilla-La Mancha y especialmente a Valencia, causando no solo una destrucción devastadora y miles de damnificados, sino un profundo dolor que aún resuena”, destacó el monarca, haciendo hincapié en la pérdida que sienten tanto las familias como la sociedad en su conjunto.

El Rey subrayó que “hoy, nuestra memoria se centra en las víctimas de aquella tragedia”, haciendo énfasis en la singularidad de cada historia y cada vida que fue arrebatada. “Cada uno de ellos es parte de una memoria colectiva que debemos preservar; ellos son la razón de este día de emociones, un día cuya complejidad es difícil de plasmar en palabras”, explicó con sinceridad.

Ante la magnitud del sufrimiento, el monarca reflexionó sobre las limitaciones de las palabras en momentos así, reconociendo su intento de imaginar lo que podrían necesitar escuchar los familiares. “Siento un dolor sincero que nos une a todos, a los que comparten este duelo y también a toda España”, expresó, reiterando la importancia de manifestar este sentimiento en un momento tan delicado.

Además, el Rey destacó la necesidad de investigar a fondo las causas de esta tragedia para aprender a prevenir futuros desastres. “Debemos trabajar juntos para evitar que algo así se repita”, afirmó, garantizando que tanto él como la Reina están solidariamente con los familiares de las víctimas.

Dirigiéndose a los dolidos, Felipe VI deseó que sus palabras fueran un abrazo reconfortante para aquellos que han sufrido tanto, así como para quienes han brindado su ayuda y apoyo. “Que nuestro deseo de unidad y esperanza les envuelva, recordándoles que no están solos en este proceso de sanación”, concluyó el Rey, deseando que su mensaje de cariño y respeto llegue al corazón de todos los presentes.