VALÈNCIA, 27 de noviembre. En un claro rechazo a la próxima investidura del candidato popular Juanfran Pérez Llorca, que pretende sustituir a Carlos Mazón como presidente de la Generalitat, la líder del PSPV y ministra de Ciencia, Diana Morant, junto al síndic de Compromís, Joan Baldoví, han calificado este proceso de “farsa”. Ambos dirigentes han hecho hincapié en su descontento con el actual escenario político que, según ellos, carece de transparencia y genuinidad.
En declaraciones realizadas a los medios frente a Les Corts, Morant ha descrito la investidura como “de carácter artificial”. Ha subrayado que la renuncia de Mazón fue “una plataforma de engaños”, sugiriendo que la investidura de Pérez Llorca sigue esa misma línea de desinformación hacia la ciudadanía valenciana. “Es simplemente un truco más para distraer a la población”, afirmó.
La secretaria general del PSPV también denunció el escaso interés que han mostrado las figuras de la dirección nacional del PP, como Alberto Núñez Feijóo y Santiago Abascal, al no asistir al evento que marca la nueva etapa del gobierno en la comunidad valenciana. “Tanto Feijóo como Abascal parecen estar desconectados de la realidad valenciana”, enfatizó.
Morant ha manifestado su preocupación, indicando que hasta el momento no se han revelado detalles sobre el acuerdo entre el PP y Vox que daría luz verde a la presidencia de Pérez Llorca. “Si no sabemos qué condiciones están en juego, podemos temer lo peor”, dijo, cuestionando la opacidad que rodea las negociaciones previas a esta investidura.
La ministra argumentó que el silencio que rodea a este acuerdo es alarmante. “¿Qué es lo que ocurrió el 29 de octubre para que haya tanto secretismo y tantos relatos contradictorios?”, se preguntó, sugiriendo que el mismo patrón se repetirá con la investidura, donde a medida que avancen los días, irán saliendo a la luz las condiciones impuestas por Vox.
Morant anticipó que cualquier información que surja probablemente será accidental y poco favorable para los derechos de los valencianos. “Las decisiones, hasta ahora, han tenido un costo humano devastador, 229 vidas perdidas que no deben olvidarse”, hizo hincapié.
En relación a Pérez Llorca, criticó que, al ser estrecho colaborador de Mazón, su ascenso al cargo no traería consigo ningún cambio significativo, ya que encarnaría la continuidad del mismo modelo político. “Es un mero representante de Mazón, cuya agenda seguirá vigente”, destacó.
Además, Morant aclaró que la vigilancia del debate de investidura por parte de Abascal y la presencia de Mazón en Les Corts subrayan que el dominio del PP en la comunidad sigue intacto. En contraposición, reafirmó que los grupos de la oposición tendrán un papel crucial en la defensa de la dignidad y los derechos de los ciudadanos.
Por último, envió un mensaje esperanzador a las víctimas y a la sociedad valenciana: “Siempre hay alternativas y un camino hacia el futuro que es posible construir juntos”, concluyó.
En la misma línea, Joan Baldoví, síndic de Compromís, expresó que sus expectativas para la investidura son sombrías, anticipando una sumisión del PP ante las presiones del extremismo. Reiteró que la llegada de Pérez Llorca significaría simplemente un "Mazón 2.0".
Baldoví abogó por la necesidad de devolver el poder de decisión a los valencianos, reafirmando que la legitimidad del cargo debe surgir de la voluntad popular y no de negociaciones entre políticos en Madrid. “No se trata de elegir a un candidato en una oficina, sino de que la voz de los ciudadanos sea escuchada en las urnas”, concluyó.
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