El conseller de Agricultura, Agua, Pesca y Ganadería, Miguel Barrachina, ha declarado que en la Comunitat Valenciana se ha llevado a cabo un proceso deliberado de demonización de todo el sector primario. Según él, esta campaña de Inspección de Trabajo en el campo y las regulaciones estatales y del Botànic han sido injustas.

En una entrevista con Europa Press, Barrachina criticó las inspecciones de trabajo realizadas por el presidente Pedro Sánchez y la ministra Yolanda Díaz, afirmando que vinieron a buscar esclavistas y encontraron héroes. Resaltó que los agricultores valencianos, a pesar de perder dinero, continúan manteniendo las huertas de sus antepasados.

El conseller cuestionó las preguntas realizadas por la Inspección de Trabajo a los agricultores, y señaló que el proceso de demonización del sector ha llevado a negarles agua y condiciones adecuadas, provocando un éxodo de agricultores a otras comunidades. Prometió apoyar activamente a los agricultores para que los recursos invertidos se destinen según sus necesidades.

Miguel Barrachina también mencionó la demonización de los cazadores y la necesidad de facilitar su actividad, argumentando que son aliados de los agricultores. Destacó la importancia de controlar la fauna salvaje para evitar situaciones como la propagación de enfermedades, como la sarna en la cabra hispánica.

En cuanto a las exportaciones, el conseller criticó la falta de controles en algunos puertos europeos y abogó por igualdad de condiciones en acuerdos comerciales. También expresó su oposición al cuaderno digital para los agricultores valencianos y la necesidad de proteger los productos locales frente a la competencia extranjera.

En general, Barrachina defendió la importancia de mantener las mismas reglas y filtros en las fronteras para competir con éxito en el mercado internacional, demostrando su compromiso con el sector primario de la Comunitat Valenciana.