Belén Cuevas, una joven oriunda de Paiporta, Valencia, ha destacado recientemente al obtener una notable calificación de 9,16 en la Prueba de Acceso a la Universidad. Esta cifra la coloca en el primer lugar entre los estudiantes afectados por la DANA durante la convocatoria extraordinaria de julio. Con la vista puesta en su futuro, Belén desea estudiar Ingeniería Biomédica en la Universitat Politècnica de València, un campo que combina su pasión por la salud y la tecnología.

La estudiante del IES Andreu Alfaro expresó su satisfacción por los resultados, después de haber enfrentado un año académico marcado por desafíos significativos, especialmente las inundaciones ocurridas el 29 de octubre. Según comentó, el curso se interrumpió durante aproximadamente un mes, lo que hizo que la rutina escolar se volviera más complicada. Sin embargo, ella permaneció enfocada y tranquila, consciente de la proximidad de la PAU.

Sobre los obstáculos que tuvo que superar, Cuevas destacó que el desafío estaba presente incluso antes de la DANA. A pesar de los contratiempos, había decidido dar lo mejor de sí misma y alcanzar las notas más altas posibles, intensificando su preparación para la selectividad. La situación, sin embargo, se hizo más ardua a raíz de las inundaciones.

Afortunadamente, la joven pudo retomar sus estudios rápidamente, ya que su hogar no sufrió daños en comparación con muchas otras viviendas en su comunidad. Belén comentó que siempre había estudiado en casa, lo que le permitió continuar con su plan de estudios una vez que se restauraron los servicios básicos. "Pude seguir estudiando sin problemas una vez que todo volvió a la normalidad", reflexionó.

Sin embargo, Belén también recordó que su centro educativo sí enfrentó las repercusiones de las inundaciones. Tras casi un mes fuera, regresaron poco a poco, asistiendo a clases durante unas horas. "Lo que realmente valoro son el esfuerzo y el apoyo incondicional de mis profesores, quienes también han vivido esta experiencia de cerca", subrayó.

A pesar de sus logros, Cuevas observó que varios de sus compañeros no alcanzaron las notas deseadas. Este año, el formato de evaluación cambió, lo que complicó el proceso para algunos. Sin embargo, existe la esperanza de que las calificaciones requeridas para acceder a las carreras sean más accesibles a medida que avanza el proceso de adjudicación.

En relación con su futuro académico, la joven tiene claro que su pasión se encuentra en la Ingeniería Biomédica. “Siempre me ha intrigado el ámbito de la Medicina, al igual que el de la tecnología y los robots, y esta carrera me brinda la oportunidad de combinar ambas áreas”, afirmó entusiasta.

Por último, Belén quiso ofrecer un consejo a aquellos que se enfrentan a circunstancias desafiantes: “Es crucial mantener una buena organización, ser constante y también encontrar tiempo para descansar. La PAU, aunque parece intimidante, no es tan diferente a los exámenes que hemos estado haciendo a lo largo del año escolar”.

Después de todo su esfuerzo y dedicación, Belén ahora disfruta de unas merecidas vacaciones de fin de curso con sus amigos, aprovechando al máximo el verano y el descanso que tanto ha trabajado para conseguir.