VALÈNCIA, 8 de julio. En un emocionante anuncio, Bioparc Valencia ha celebrado el nacimiento de dos blesboks, una especie de antílope que estuvo al borde de la extinción. Este animal, que se encuentra en la Lista Roja de la UICN, fue víctima de masacres generalizadas en el siglo XIX.

El parque está comprometido con la conservación de esta especie, y forma parte de un programa internacional de cría en cautiverio. Actualmente, alberga un grupo que incluye un macho y cuatro hembras, y con estos dos recién nacidos, la población ha crecido, brindando esperanza para la recuperación del blesbok (Damaliscus pygargus phillipsi).

Como parte de su cuidadoso protocolo, Bioparc ha implementado un monitoreo no invasivo para observar a las crías y asegurar que su comportamiento y alimentación sean completamente naturales y saludables. Este enfoque garantiza que los pequeños se adapten adecuadamente a su entorno.

Además, el equipo veterinario realizó un exhaustivo examen de salud, procediendo a identificar a las crías con microchips y crotales. Ahora, estos adorables antílopes, fácilmente reconocibles por su color crema, pueden ser admirados en el recinto exterior que reproduce la sabana durante la temporada de lluvias.

La llegada de estas nuevas crías ha cautivado a los visitantes, quienes no solo disfrutan de su tierna presencia, sino que también son reminded de la imperiosa necesidad de actuar en pro de la conservación de especies en peligro.

El compromiso de Bioparc se extiende más allá de los blesboks, incluyendo a otros fascinantes animales. Entre ellos destacan los jóvenes elefantes Makena y Malik, los dos chimpancés Cala y varios facóqueros, así como las gacelas de Thomson, que también se encuentran bajo el cuidado del parque.