En un movimiento significativo, la Comisión Europea ha autorizado este lunes un anticipo de 100 millones de euros para España, en el marco del Fondo Europeo de Solidaridad. Este desembolso tiene como objetivo ayudar a cubrir los costos ocasionados por las inclemencias del tiempo que el pasado octubre provocaron devastadoras inundaciones, resultando en la trágica pérdida de más de 200 vidas, principalmente en la Comunidad Valenciana.

La cantidad de 100 millones es el límite máximo permitido por la normativa vigente, y la Comisión ha considerado esta cantidad "adecuada" a pesar de no contar con el monto total requerido. Tradicionalmente, el presupuesto para anticipos se limita a 50 millones, lo que llevó a la Comisión a solicitar el 6 de marzo pasado permisos adicionales a la Eurocámara para obtener otros 50 millones más.

El Gobierno español envió a Bruselas el 20 de enero la documentación de los gastos que cumplen con los criterios necesarios para recibir financiación del Fondo de Solidaridad. Esta cantidad ya alcanza los 4.404 millones de euros, pero el monto final será determinado por la evaluación del Ejecutivo comunitario.

Es fundamental destacar que la concesión de este anticipo no garantiza el importe total de la ayuda, la cual se determinará tras el análisis exhaustivo de la solicitud por parte de la Comisión, así como la disponibilidad de recursos presupuestarios.

Los fondos podrán ser utilizados para la restauración de infraestructuras clave, incluyendo sistemas de energía, agua, sanidad, educación y telecomunicaciones. También se destinarán a la protección del patrimonio cultural y a labores de limpieza necesarias tras las inundaciones.

El vicepresidente de Cohesión y Reformas, Raffaele Fitto, ha subrayado la “grave devastación” ocasionada por la DANA en Valencia, que resultó en la pérdida de muchas vidas y la destrucción de numerosas viviendas e infraestructuras. Fitto ha reafirmado el compromiso de la Comisión de apoyar a la población y a la región en su ardua tarea de recuperación.