VALÈNCIA, 12 de noviembre.

La vicepresidenta primera y consellera de Servicios Sociales, Igualdad y Vivienda de la Generalitat, Susana Camarero, ha denunciado que las pulseras de protección destinadas a víctimas de violencia de género presentan graves fallos en su funcionamiento, ya que generan alertas que no siempre se relacionan con situaciones de emergencia. Ante esta problemática, Camarero ha revelado que la administración autonómica elevará el asunto al Gobierno central, pidiendo una solución inmediata a esta preocupante situación.

La consellera hizo estas declaraciones durante su participación en un Encuentro SER, donde estuvo acompañada por Vicente Lafuente, presidente de la Confederación Empresarial de la Comunidad Valenciana. Aseguró que el problema de las pulseras antimaltrato es de suma gravedad y que ha sido objeto de sus críticas desde hace meses.

“Hemos advertido en múltiples ocasiones sobre los riesgos que suponen estos dispositivos, los cuales parecen ser deprimentemente ineptos. Las pulseras, adquiridas a un proveedor poco fiable, han dejado a numerosas mujeres sin la protección esencial que necesitan”, afirmó Camarero.

Recordó que las víctimas han manifestado problemas con estos dispositivos, que han fallado en detectar el incumplimiento por parte de sus agresores, poniendo en riesgo la seguridad de las mismas.

Camarero explicó que en la Comunitat Valenciana se están reportando casos en los que las víctimas reciben alertas constantes, a menudo infundadas, lo que genera confusión y ansiedad. “Las pulseras emiten avisos sin que haya una amenaza palpable, lo que complica aún más la situación de vulnerabilidad que ya enfrentan estas mujeres”, aclaró.

La vicepresidenta subrayó que esta situación es insostenible, pues no se puede añadir más presión a mujeres que ya atraviesan momentos extremadamente difíciles en su vida. “No es aceptable que estén en un estado constante de incertidumbre, sin saber si las alertas son causadas por un agresor cercano o por un fallo en el sistema”, sostuvo.

Camarero continuó criticando al Gobierno de España por su falta de acción frente a este asunto, indicando que han militado en una campaña de promoción de VioGen, mientras desatienden problemas reales que afectan a la vida de las mujeres. “Este gobierno les ha dado la espalda, tanto a ellas como a la Comunidad Valenciana”, afirmó contundente.

Asimismo, acusó al Ejecutivo central de no gestionar adecuadamente las necesidades de la ciudadanía, especialmente en temas críticos como el de las mujeres que sufren violencia. Exigió respuestas claras y efectivas, asegurando que es imperativo atender las necesidades de seguridad y tranquilidad de las víctimas.

Al ser cuestionada sobre las razones detrás de las fallas técnicas en las pulseras, Camarero instó al Gobierno a proporcionar explicaciones, señalando que el problema radica en un cambio en su diseño y funciones. “Antes no fallaban, ahora lo hacen demasiado. Es incomprensible”, agregó.

Esto ha creado un ambiente de incertidumbre angustiante para las víctimas, lo que se convierte en una carga adicional en épocas ya de por sí complicadas. “La ansiedad es el peor enemigo en estos momentos críticos”, reiteró.

Sobre el tiempo que lleva esta situación ocurriendo, Camarero mencionó que han recibido reportes sobre esto recientemente y que incluso ha habido denuncias similares en otras comunidades autónomas. “El Gobierno debe abordar este asunto con seriedad y dejar de ocultar la verdad detrás de la crisis que enfrentan estas pulseras. Las víctimas necesitan respuestas y protección efectivas”, concluyó.