El presidente del Partido Popular de la Comunitat Valenciana y candidato a la Presidencia de la Generalitat, Carlos Mazón, ha manifestado su crítica hacia el aspirante del PSPV, Ximo Puig, por salir a "empatar las elecciones" y estar contento con reeditar el Botánico. En estos comicios, según Mazón, hay que elegir entre PSOE o agua. Lo ha declarado durante su intervención en un desayuno informativo del Executive Forum España, empleando un símil deportivo para afirmar que salen a ganar las elecciones y a gobernar en solitario. Además, ha manifestado su sorpresa ante el hecho de que algunos se contenten con empatar y decir que está "encantado de gobernar con Compromís, con Podemos, con Esquerra Unida, con las confluencias y a proponer más de lo mismo, la tercera reedición de ese más de lo mismo".

Mazón ha insistido en que su objetivo es ganar las elecciones y gobernar en solitario. En caso de que no se den los números, no ha querido desvelar si gobernaría con Vox. Igualmente, ha hecho referencia a la situación del trasvase Tajo-Segura y ha señalado que la solución llegará "con un gobierno del PP y de Alberto Núñez Feijóo".

En cuanto a la presión fiscal, el candidato ha centrado gran parte de su intervención en este tema, criticando la próxima normativa estatal que se está preparando para la armonización entre autonomías y la ha calificado de 'enganyifa'. Para Mazón, cuando unas comunidades bajan impuestos, no se llora, se compite. Asimismo, ha destacado su propuesta de implementar en la administración un "nuevo marco burocrático". Esto se reflejaría en un "canal empresa" para que los inversores puedan conocer el estado de sus solicitudes y un "nuevo marco fiscal" con bajada de impuestos a todos e impuestos cero al campo valenciano mientras dure "esta situación tan complicada". Para llevar a cabo estas medidas, ha presentado el plan Simplifica que han propuesto los 'populares' que será un decreto ley ya que hay que "dibujarlo lo antes posible" para generar un entorno de libertad y de seguridad jurídica.

Mazón ha asegurado que, en caso de gobernar, tanto él como la candidata a la Alcaldía de València, María José Catalá, renuncian públicamente y oficialmente a los "100 días de gracia que se conceden a los nuevos gobiernos". "Nuestra tierra no tiene 100 días", ha dicho. Él y Catalá esperan sustituir los "100 días de cortesía por las 100 primeras medidas para el cambio". Al respecto, ha subrayado que hay "mucha normativa que está alargando la burocracia" y que el primer decreto que espera firmar en caso de que sea presidente tras los nombramientos de los consellers, "será la eliminación del impuesto a la muerte en la Comunitat".

El candidato ha indicado que comenzará por la eliminación del impuesto al turismo y que encargará estudios económicos para cambio en la renta de cara al 2024 y la auditoría "real y eficaz de los departamentos de salud de la Comunitat Valenciana" para decidir el tipo de gestión. Sobre los fondos, ha señalado que va a "quitar la grasa" de la administración y espera generar más ingresos al facilitar las inversiones. "No somos una comunidad que sestea", ha afirmado, "somos una comunidad que salimos a vender nuestros productos".