Las autoridades españolas han lanzado una advertencia sobre el surgimiento de lo que han denominado "inundaciones de nueva generación" en el país, relacionando este fenómeno con eventos recientes como la DANA que afectó a España entre el 29 de octubre y el 4 de noviembre, la cual ilustra la gravedad de este tipo de desastres.

El Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO) ha anunciado que, a partir del lunes que viene, se abrirá un periodo de consulta pública respecto a un nuevo real decreto que busca implementar medidas para gestionar los riesgos de inundaciones. Esta consulta estará abierta hasta el 19 de abril y los ciudadanos podrán enviar sus observaciones a través de un correo electrónico habilitado para tal fin.

Este real decreto pretende no solo hacer una evaluación de la situación actual, sino también introducir modificaciones a las normativas existentes sobre la evaluación y gestión de riesgos de inundación y la regulación de costas, con el objetivo de reducir el peligro tanto para las personas como para los bienes materiales.

En el material distribuido para la consulta, el Ministerio destaca que el nuevo marco normativo buscará establecer restricciones en el uso de zonas propensas a inundaciones y fomentar la adaptación de infraestructuras vulnerables a los riesgos asociados con estas catástrofes naturales.

Además, se pretende crear un sistema de cooperación entre las diversas administraciones públicas para implementar medidas eficaces que mitiguen el impacto de las inundaciones. También se enfatiza la importancia de la educación en prevención de riesgos, tanto para empleados del sector público como para la ciudadanía, en coordinación con las autoridades de protección civil.

El MITECO recalca que las inundaciones son las desastres naturales más comunes en España, causando daños significativos. Según datos oficiales, representan el 65% del total de indemnizaciones por catástrofes extraordinarias gestionadas por el Consorcio de Compensación de Seguros.

La alerta se extiende debido al calentamiento global, que está aumentando el riesgo de inundaciones en varias regiones del mundo, incluida Europa, y específicamente en la cuenca mediterránea. La DANA mencionada anteriormente es señalada como un indicativo de la magnitud de este nuevo tipo de inundaciones que podrían volverse más recurrentes en el futuro.

El documento también hace referencia a incidentes climáticos que tuvieron lugar en Europa recientemente, como las devastadoras inundaciones del verano de 2021 en Alemania y Bélgica, que resultaron en más de doscientas muertes, así como a las intensas lluvias ocurridas nuevamente en Alemania en junio de 2024, donde se registraron precipitaciones extremas.

El mensaje es claro: aunque España siempre ha enfrentado inundaciones, especialmente en el levante, los patrones actuales sugieren que el país podría estar entrando en una nueva era de inundaciones, análoga a lo que se ha observado con los incendios forestales, particularmente en la región mediterránea.