VALÈNCIA, 29 de octubre.

Los seres queridos de quienes perdieron la vida en la devastadora dana del año pasado convocaron a todos a "honrar su memoria" durante el emotivo funeral de Estado que tuvo lugar en conmemoración de los 237 fallecidos a causa de las inundaciones. En este acto significativo, hicieron un llamado a que prevalezcan "la verdad, el respeto y la humanidad", mientras reafirmaron su convicción de que "la unidad es más esencial que nunca".

Andrea Ferrari, Naiara Chuliá y Virginia Ortiz, familiares de las víctimas originarias de València, Bétera y Letur, respectivamente, se dirigieron a los presentes en representación de todos aquellos que sufrieron esta tragedia, durante la ceremonia que se llevó a cabo en el Museu de les Ciències de València, al que asistieron los Reyes Felipe y Letizia, así como el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, junto a otras autoridades invitadas.

Con gran emoción, Andrea Ferrari rememoró el impacto desolador que trajo consigo la dana: "Ese día cambió irrevocablemente el curso de nuestras comunidades y nuestras vidas personales", expresó. Al mismo tiempo, instó a que esta ceremonia sea vista no solo como un tributo a los que ya no están, sino como un reconocimiento hacia aquellos que continúan luchando, "con cicatrices pero con una mirada decidida".

Asimismo, destacó el inmenso poder de la solidaridad que se mostró en medio de aquellos momentos difíciles, agradeciendo de corazón "a todos quienes se volcaron en ayudar, a quienes abrieron sus puertas, y al personal de rescate y voluntarios que llegaron desde todos los rincones de España, dejando claro que, a pesar del caos, la humanidad prevalece".

Ferrari también reconoció el papel fundamental de las asociaciones de víctimas, que han estado a su lado para canalizar su dolor y buscar justicia. Se recordó con ternura a su madre, Eva, quien falleció en la tragedia: "Ella era la luz en nuestras vidas, siempre llena de amor y fuerza, y aquellos que la conocieron saben lo afortunados que somos por haberla tenido cerca".

De manera intensa, expresó su orgullo de ser hija de Eva, destacando la constante inspiración que su madre representa para ella, instándola a seguir adelante a pesar del dolor: "Con su amor y su fuerza, hoy sigo encontrando motivos para sonreír".

En su intervención, enfatizó la importancia de recordar a cada una de las personas que se perdieron, afirmando que su legado vive a través de aquellos que aún están aquí. "Este funeral no es solo un recuerdo; es un compromiso con la vida y la valentía, es un acto de unión que nos motiva a vivir en su memoria", declaró con fervor.

Naiara Chuliá, por su parte, habló del profundo dolor que siente su familia, resaltando que "son 237 historias trágicas que hoy están presentes aquí". A pesar del sufrimiento, manifestó su esperanza de que en algún momento encontrarán razones para avanzar. "Mis hijos, a pesar de haber perdido a su madre, no deben perder la esencia de lo que ella fue", señaló con valentía.

Chuliá recordó la desgarradora experiencia de tener que contarles a sus hijos que su padre no volvería: "Ese fue el momento más difícil de mi vida. La vida se desgajó en mil fragmentos, y ahora debo reconstruirla sin él, pero con el apoyo de quienes nos rodean".

Finalmente, Virginia Ortiz conmemoró a su primo, quien luchó por justicia hasta su último aliento: "Recordar su nombre es un acto de fortaleza, porque no estamos solos y debemos mantenernos unidos". Agradeció a todos los profesionales y voluntarios que rescataron a sus seres queridos, resaltando que "nuestro vecino no debe ser visto como un enemigo". En un tono firme, subrayó que la verdadera paz solo puede alcanzarse en sociedades basadas en la libertad, la dignidad y la seguridad.

Ortiz también advirtió sobre la responsabilidad de las autoridades y afirmó que no fueron las inundaciones las que causaron esta tragedia, sino la desidia de quienes tienen la obligación de cuidar de la seguridad pública: "Quien omite su deber es el verdadero causante de las muertes", provocando aplausos entre el público. Con determinación, cerró su discurso instando a no dejar que aquellos que amenazan con desestabilizar nuestra sociedad tomen el control, reafirmando que "el poder siempre ha estado en nuestras manos y, juntos, lograremos justicia".