El Ayuntamiento de València prevé establecer nuevas fechas para las emblemáticas Fallas de 2026, con la 'Crida' programada para el 22 de febrero, y actividades de verbenas en las comisiones que se llevarán a cabo entre el 16 y el 18 de marzo, así como los sábados 7 y 14 de ese mismo mes.

En una reciente reunión de la Mesa del Diálogo Fallero, presidida por el concejal de Fallas, Santiago Ballester, se discutieron estas propuestas, que buscan ordenar y facilitar la convivencia entre las comisiones falleras y la ciudadanía durante las festividades. Se ha considerado que las comisiones podrían comenzar a montar las carpas a partir del 5 de marzo, permitiendo que aquellas que se ubiquen en solares lo hagan un día antes, el 4 de marzo.

Este bando municipal, que informa sobre las normas para las próximas fiestas, es considerado por el Ayuntamiento como fundamental para establecer un marco regulador que favorezca la buena convivencia en la ciudad durante una de sus celebraciones más importantes.

La planificación anticipada, que llega en julio cuando tradicionalmente se realizaba entre septiembre y octubre, tiene como objetivo dar mayor tiempo a las comisiones para gestionar permisos y actividades específicas, tal como ha señalado Ballester.

Sin embargo, no todos están de acuerdo con esta iniciativa. Desde el grupo político Compromís, el concejal Pere Fuset ha expresado preocupaciones sobre el aumento de las fechas de instalación de carpas y ha sugerido controlar mejor el uso de petardos para mejorar la convivencia, pidiendo al Gobierno de María José Catalá que reconsiderase el contenido del bando municipal.

Fuset ha señalado que la propuesta actual, que duplica los días de carpas en comparación con 2020, podría amenazar los acuerdos previos alcanzados con el sector y generar más discordia en lugar de fomentar un ambiente festivo positivo.

Por su parte, Fuset ha elogiado la convocatoria de la Mesa de Diálogo, destacando que la presión ciudadana ha llevado al gobierno a recuperar un espacio de discusión necesario entre vecinos, comerciantes y colectivos falleros, lo que a su vez es visto como un paso positivo para la festividad.

El concejal ha reafirmado la importancia de restaurar los acuerdos alcanzados por el anterior gobierno, que permitían que las carpas no afectaran el tráfico hasta el 12 de marzo, y ha indicado que cualquier adelanto en estas fechas podría perjudicar la movilidad y la tranquilidad de los vecinos durante los días laborales previos a la fiesta.

Además, Compromís ha enfatizado la necesidad de establecer reglas claras sobre el uso de pirotecnia, sugiriendo la señalización de áreas apropiadas y regulando horarios para evitar molestias que puedan impactar especialmente a grupos vulnerables en la comunidad, como personas mayores o personas con trastornos del espectro autista.

La coalición también propuso la reducción de las 'mojiterías' y mercadillos ambulantes, así como explorar nuevas vías de financiación para las comisiones, buscando un equilibrio que proteja la esencia de las Fallas como Patrimonio de la Humanidad y minimice el impacto sobre el vecindario y el comercio local.