VALÈNCIA, 17 de diciembre.

Un ingeniero especializado en Caminos ha testificado recientemente en el tribunal de Catarroja acerca de la gestión de la tormenta que afectó a la presa de Buseo. En su declaración, proporcionó varias conversaciones de WhatsApp que ilustran la situación crítica vivida en aquellos días. En uno de los mensajes, enviado el 29 de octubre a las 20:13, se advertía sobre el inminente desbordamiento del aliviadero de la presa entre las 2:00 y 3:00 horas.

Estos mensajes, que comprendían el periodo del 26 al 29 de octubre de 2024, fueron revisados por la Letrada de la Administración de Justicia. Aunque las imágenes no estaban disponibles debido a que habían sido eliminadas, el ingeniero explicó que los mensajes incluían alertas meteorológicas de Aemet y capturas de pantalla del sitio Avamet, las cuales prometió buscar y presentar ante el tribunal.

El primer mensaje del día era a las 6:45 de la mañana, advirtiendo del aviso naranja por lluvias, con una previsión de acumulación de hasta 40 litros por metro cuadrado en una hora y 140 litros en 12 horas. A medida que avanzaba la jornada, otro miembro del grupo expresaba preocupación por la situación en Utiel, donde los barrancos ya comenzaban a desbordarse.

A lo largo del día, los mensajes reflejaban la creciente preocupación entre los miembros del grupo. A las 18:54, se mencionaba la escasa cobertura de llamadas desde la presa, a causa de las intensas lluvias que afectaban zonas como Requena y Chiva, con cortes en importantes carreteras. A pesar de las condiciones adversas, se comunicaba que el suelo estaba relativamente seco y que la cuenca de la presa había recibido entre 150 y 250 mm de lluvia en 24 horas.

El ingeniero también transmitió que, según los datos del SAIH, a las 20:13 se esperaba que el nivel en Buseo alcanzara el aliviadero. Ese mismo día, a las 20:41, un colega le informó que había recibido una llamada del SAIH pidiendo información sobre la presa. En respuesta, el ingeniero aseguró que había advertido a la Generalitat y a la Confederación Hidrográfica del Júcar sobre la inminente posibilidad de desbordamiento de la presa.

El testigo explicó que el día en que se produjo la tormenta, envió correos a las autoridades pertinentes con informaciones críticas sobre el caudal y un aviso de desbordamiento proyectado en 3,5 horas a causa de las lluvias intensas. Aunque intentó llegar a la presa, se vio obligado a regresar a Valencia donde continuó sus esfuerzos por avisar a las autoridades, enviando un segundo correo a la sala de control para comunicar que ya no podía acceder a la presa y que se encontraba en peligro de desbordamiento.

Además, realizó una llamada a la sala del '112 Comunitat Valenciana' para informar de la situación crítica de la presa. Según el ingeniero, el último dato del sensor de la presa fue recibido antes de las 22:00 horas, momento en el que dejó de funcionar debido a un corte eléctrico.

En otro informe relacionado, la Letrada de la Administración de Justicia ha confirmado que se recibió una copia del Informe de Revisión de la Presa de Buseo, el cual subraya las deficiencias y propuestas consideradas necesarias para asegurar su seguridad. El análisis ha revelado que la presa no cuenta con la capacidad adecuada para manejar avenidas con un periodo de retorno de 100 años, lo que plantea serias dudas sobre su seguridad.

El informe destaca que, aunque se han tomado decisiones y acciones para mejorar la situación, se necesita realizar un estudio exhaustivo de las alternativas disponibles para adaptar los desagües a las exigencias actuales y asegurar la protección de esta instalación judiciaria."," lo que pertenece a la seguridad de numerosas comunidades cir un riesgo identificadas como vulnerables.

Ubicada en el curso del río Reatillo, la presa de Buseo fue inaugurada en 1915. A lo largo de los años, especialmente tras episodios de fuertes lluvias, se ha convocado a expertos para evaluar su estado. Desde 2018, se han implementado diversas medidas para garantizar su funcionamiento, incluso a fin de evitar futuros desastres. Sin embargo, la situación actual sigue siendo preocupante y necesita atención urgente.