VALÈNCIA, 28 de agosto.

Un trágico suceso sacudió la noche del miércoles en el barrio de Los Faroles, en Alaquàs, Valencia, donde un hombre fue asesinado a tiros en su propia casa. Según relatos de los vecinos, el ataque fue perpetrado por un individuo que se presentó en el domicilio y le pidió al hijo de la víctima, un joven de 15 años, que llamara a su padre antes de abrir fuego indiscriminadamente.

El menor salió despavorido, gritando que habían matado a su padre, y fue su madre quien brindó los primeros auxilios al herido hasta que llegaron las autoridades. La mujer, visiblemente afectada, contó que, pese a que el agresor no entró en la vivienda, el ataque fue directo y mortal. "El chico abre la puerta y le pregunta si está su padre. Justo después, escuchamos tres disparos", relató.

La testigo, que inicialmente confundió los disparos con petardos, decidió esconderse tras escuchar el primer estruendo. Sin embargo, al oír el segundo, reconoció la gravedad de la situación y permaneció oculta hasta que la escena se tornó aún más alarmante con el grito desesperado del joven pidiendo ayuda. "Fue aterrador, aún estoy temblando", confesó.

A pesar de las múltiples llamadas a la policía, los vecinos afirmaron que la respuesta fue lenta, demorando más de veinte minutos en llegar al lugar. "Mi marido fue quien asistió al hombre herido, él estaba perdiendo mucha sangre", añadió la mujer, que se mostró abatida por la falta de rapidez de los servicios de emergencias.

La víctima, de 40 años, había vivido en el barrio durante un tiempo y era conocido por su carácter reservado. "Él no se metía con nadie, era una persona tranquila", comentó la vecina. Se mencionó que el sospechoso del asesinato no era del barrio y se sospecha que el crimen podría estar relacionado con celos, según testimonios de otros residentes que percibieron la magnitud del acontecimiento por la presencia policial.

Otra vecina corroboró que en el área han ocurrido incidentes violentos relacionados con ajustes de cuentas, pero lo que sucedió esa noche fue particularmente alarmante. "Esto es un barrio acostumbrado a ciertas tensiones, pero lo de anoche fue algo sumamente grave", concluyó, reflejando la inquietud que el incidente ha dejado en la comunidad.