ALICANTE, 30 de noviembre.

Agentes de la Policía Nacional han realizado la detención en Alicante de un fugitivo que era buscado por las autoridades belgas por su presunta implicación en un tiroteo que tuvo lugar en la ciudad de Genk (Bélgica) el pasado mes de octubre. Según se informa, este individuo habría disparado e hirido a su expareja y a un amigo. En caso de ser declarado culpable, podría enfrentarse a una condena de hasta 30 años de prisión por homicidio en grado de tentativa en Bélgica.

La investigación para dar con su paradero comenzó cuando las autoridades belgas enviaron información a la Sección de Localización de Fugitivos, advirtiendo que el sospechoso podría estar escondido en España junto a algunas amistades. Así lo ha afirmado la Policía Nacional en un comunicado.

Una vez recibida esta información, los investigadores pudieron confirmar que el fugitivo se encontraba en la ciudad de Alicante. En consecuencia, los agentes desplazados llevaron a cabo las gestiones necesarias para su detención. Fue hallado cerca de un negocio de comida rápida propiedad de una amiga, y allí mismo se procedió a su arresto.

El pasado 7 de octubre, el prófugo envió a su expareja una fotografía de su perro, supuestamente con la intención de amenazarla y lograr así que regresara a su casa para comprobar el bienestar del animal.

Cuando la exnovia se acercó a su domicilio junto a un amigo para verificar el estado del perro, el detenido realizó múltiples disparos contra ambos sin mediar palabra, provocando heridas en ambos individuos.

Desde aquel momento y hasta su captura, el fugitivo se encontraba en paradero desconocido. Por los delitos mencionados, se le podría imponer una condena de hasta 30 años de prisión por homicidio en grado de tentativa en Bélgica.